El Festival de Jazz de San Sebastián celebra este año su 60ª edición con un cartel en el que se aventura hasta qué punto este lenguaje sigue vivo y no ha quedado difuminado en la entropía de los ‘standards’ del pasado. En ese sentido, resulta fundamental la presencia de Nala Sinephro, compositora, multiinstrumentista y productora belga de raíces caribeñas, cuya música se plantea como un cruce entre jazz, electrónica y ambient.. Nacida en las afueras de Bruselas en 1996, Sinephro creció en un entorno familiar atravesado por la música y la naturaleza. Su madre, profesora de piano clásico, y su padre, saxofonista de jazz originario del Caribe francés, le transmitieron una sensibilidad que pronto se tradujo en una curiosidad por los instrumentos. Comenzó tocando el violín y la gaita, pero fue a los 16 años, al descubrir un arpa de pedal en una sala del conservatorio, cuando encontró su voz musical. «Sentí que era mi lenguaje. Fuerte, pero con una voz tranquila», recordaba hace un par de años en una entrevista para ‘Pitchfork’, el portal musical estadounidense que ha sido uno de los muchos medios rendidos a la incatalogable compositora e intérprete.. Un tumor en la mandíbula durante la adolescencia interrumpió su formación académica. Fue en Londres donde encontró finalmente un entorno fértil para desarrollar su propuesta. La escena jazzística de la capital británica, con figuras como Nubya Garcia o Shabaka Hutchings, le ofreció una comunidad artística abierta a la experimentación, tras diversas exploraciones por la escena hardcore.. «Nadie en la escuela sabía lo que estaba ocurriendo», rememoraba para ‘Pitchfork’ sus problemas de salud. Sólo los ojos permanentemente llenos de lágrimas de mi madre me decían lo que pasaba. Pero decidí pasar página. Me dije:‘A tomar por culo. Seré una supermujer, voy a sobrevivir como sea a esto’».. Aunque fue aceptada en el Berklee College of Music, en Boston, su paso por la institución fue breve: las dificultades económicas y la rigidez curricular la llevaron a abandonarla y buscar su propio camino. Trabajó como técnica de sonido en conciertos, una experiencia que, lejos de ser un desvío, resultó fundamental para su comprensión del espacio sonoro.. En 2021, a los 25 años, publicó ‘Space 1.8’, un debut sorprendente por su madurez y coherencia estética. Grabado parcialmente en su casa del norte de Londres, el disco proponía una exploración íntima y meditativa a través de ocho movimientos que combinan arpa, sintetizadores modulares y colaboraciones con músicos clave de la escena jazzera británica en la que se movía Sinephro. La crítica celebró su delicadeza formal y su capacidad para generar atmósferas que remiten tanto al jazz espiritual de Alice Coltrane como al ‘ambient’ de Brian Eno. «No quería mostrar virtuosismo. Sólo ver qué pasa si toco una sola nota con mucha intención», presentó en su momento aquel proyecto.. Tres años más tarde, en 2024, Sinephro lanzó en el prestigioso sello Warp ‘Endlessness’, un álbum concebido como una suite de 45 minutos donde un arpegio recurrente actúa como hilo conductor. La obra, dividida en 10 partes tituladas ‘Continuum’ representa el ciclo de la existencia según su autora. Compuesto, producido y mezclado por ella misma, el disco amplía su universo sonoro y consolida su dominio técnico. Junto a colaboradores como Morgan Simpson (batería, ex-Black Midi), Sheila Maurice-Grey (fliscorno) y Nubya Garcia (saxo), Sinephro plantea una fusión fluida entre lo acústico y lo electrónico, entre lo minimal y lo orquestal. ‘Pitchfork’ lo reconoció como uno de los discos del año, destacando su elegancia y su capacidad para «probar los límites del jazz ambiental».. Pero no es fácil acotar la música de Sinephro a un estilo concreto. La joven apuesta por una estética de la presencialidad, donde cada nota está impregnada de intención y cada silencio adquiere peso propio. «No quiero que me definan por el instrumento que toco ni por cómo me veo. Quiero que escuchen lo que tengo que decir», defiende. Esta afirmación, que resume su rechazo a los encasillamientos, refleja también su posición crítica frente a las estructuras tradicionales del mundo musical. Igual que en su reacción a la enfermedad, la autora belga ha hecho del ‘fuck off’ su modo de estar en el mundo de la interpretación. Su manera de tocar horrorizaría a los arpistas clásicos, pero no le impone romper tradiciones seculares asociadas a un instrumento cuya posición elitista prácticamente lo ha eliminado de las músicas populares.. En su paso por Jazzaldia 2025, estará acompañada por Dwayne Kilvington (bajo sintetizado), Natcyet Wakili (batería) y Chelsea Carmichael (saxofón). Su actuación, en uno de los escenarios abiertos del festival, promete ser una experiencia más que un concierto: una invitación a detenerse, escuchar y dejarse llevar por un continuo sonoro donde el tiempo –y el ego, como en algunas experiencias con enteógenos– se disuelve. La música de Sinephro no busca el impacto inmediato ni la complejidad deslumbrante, sino una belleza callada.. También, curación. Su experiencia con el tumor marcó un punto de inflexión, tanto físico como espiritual. Durante ese tiempo, encontró consuelo en la meditación, las frecuencias curativas (los sintetizadores de su casa están sintonizados en 432 herzios) y el poder restañador del sonido. Desde entonces, su música no sólo busca la belleza, sino también el equilibrio, la alineación energética, la posibilidad de sanar a través del arte. De ahí que ‘Space 1.8’ comenzase con grabaciones de sesiones de sanación con cuencos tibetanos y derivase, sin ruptura, en paisajes cósmicos de arpa y electrónica modular. Para Sinephro, la música es una extensión del cuerpo y del entorno. «Hay una sensación de transmutación en lo que hago», declaró a ‘The Guardian’ en una de sus escasísimas entrevistas. Esa dimensión casi ritual, más próxima a lo espiritual que al entretenimiento, la ha convertido en una figura singular en el universo del jazz contemporáneo.. Aunque su obra parece pensada desde la introspección, Sinephro defiende el valor del colectivo. Se considera a sí misma como parte de un tejido creativo en el que la colaboración es vital. «Cuando toco en directo, no busco destacar; intento sostener a la banda», proclama. Esa ética horizontal se manifiesta también en su forma de grabar: muchos pasajes de ‘Space 1.8’ y ‘Endlessness’ son improvisaciones colectivas captadas en tomas únicas. La precisión técnica convive con una apertura total al accidente, a lo espontáneo, al misterio.. Instalada como pieza fundamental para entender la experimentación sonora contemporánea, Nala mantiene un perfil discreto y una práctica personal centrada en la escucha profunda. Le guía, apunta, la convicción de que el sonido puede transformar estados de ánimo, abrir espacios interiores, conectar con algo que trasciende lo individual. Por eso sus discos no son solo álbumes, sino umbrales. Y su presencia en San Sebastián este verano no será solo un concierto, sino –como ella misma lo diría– una invitación a «expandirse sin miedo hacia lo desconocido».. La cita donostiarra sigue ofreciendo en su 60ª edición una oferta ecléctica que esquiva el purismo tanto como el eclecticismo informe. A lo largo de nueve días, San Sebastián se convierte en el refugio donde encontrarse con los grandes nombres del jazz de hoy y de ahora (Steve Coleman, Kurt Elling, Marc Ribot, Brad Mehldau, Dave Holland, Chris Potter), pero también con quienes han ampliado su campo de acción hacia el pop (Jamie Cullum por partida doble, en el Kursaal el día 22 y, al día siguiente, gratis en la playa de la Zurriola) o la electrónica (Nala Sinephro), sin olvidar figuras en las que permean los hallazgos de estos sonidos (The Beach Boys, en un concierto que promete ser especial tras la reciente muerte de su líder, Brian Wilson, o EXTC) y los novísimos flamencos (Yerai Cortés, Chicuelo, Marco Mezquida). Un nuevo menú apabullante para la gran cita jazzística del verano español.. La 48.ª edición del Festival de Jazz de Vitoria-Gasteiz arranca el miércoles 16 con un emocionante tributo a Charles Mingus: la Clasijazz Big Band interpretará íntegro ‘Epitaph’ en Mendizorrotza, con más de treinta músicos dirigidos por Ramón Cardo. El jueves 17 sigue una velada vocal en la que actuarán la premiada Jazzmeia Horn y, a continuación, José James presentando su último álbum, 1978, El plato fuerte del viernes 18 lo forman dos iconos internacionales: Al Di Meola y Kenny Barron, cada uno con sus respectivos tríos, sobre el escenario de Mendizorrotza. El sábado 19 cierra en tono brasileño: Dora Morelenbaum y la dupla Toquinho + Yamandu Costa traerá ritmos de bossa nova y MPB (Música popular brasileña). Durante toda la semana, el ciclo Jazz en el Teatro en Palacio Europa (conciertos cada tarde del 14 al 19) ofrecerá propuestas variadas: desde MOVE y el Álvaro Torres Trio hasta artistas gallegos como Sumrrá 25, Juan Sáiz y Sarah Hanahan.. La (también) 48.ª edición de Getxo Jazz mantiene su doble vertiente: cartel de pago en Muxikebarri con figuras internacionales, y programación gratuita por toda la villa. En el apartado de abono suenan con fuerza nombres de relumbrón: la organista Rhoda Scott abre el festival el 2 de julio con su Lady Quartet, la vocalista ganadora del Grammy Cécile McLorin Salvant toma el relevo el viernes día 4, y el saxofonista Joe Lovano presentará su trío europeo junto al Marcin Wasilewski Trio el sábado 5. A ellos se suma el concierto del clarinetista Paquito D’Rivera el 3 de julio y el cierre el domingo 6 con el trompetista Dave Douglas, en una noche que reunirá al ganador del concurso de grupos como telonero. En cuanto al generoso programa gratuito, jazz en las plazas y calles (con formatos Tercer Milenio, jam sessions en The Piper’s Irish Pub, e incluso Dixie & danza en Las Arenas), conciertos familiares matinales y exposiciones como la de Igor Sarralde en Romo Kultur Etxea. La programación completa está disponible en la web de Getxo Kultura.. El sábado 27 de junio arranca el ciclo sanjaviereño con Pink Turtle en la Plaza de España, concierto gratuito a las 22:00. El 29 de junio, en Parque Almansa, actúan Eva Slongo Quartet junto a Giovanni Mirabassi y Brooklyn Funk Essentials. El miércoles 2 de julio, Mayte Martín interpreta su repertorio en el Teatro de Invierno. El 4 de julio, doble sesión en Almansa con Joscho Stephan Trío & Costel Nitescu y Devon Allman Project. Al día siguiente continúa en Almansa con Emmet Cohen Trío + Patrick Bartley, seguido de Uroš Peric y Barcelona Big Blues Band con Saša Lešnjek. Pieranunzi-Mirabassi-Bulgarelli, Antonio Lizana Quinteto y Belter Souls, un homenaje a Michel Legrand & Stéphane Grappelli con Terraza-Roy-Boussaguet-Pi y Parker Barrow, Lady Blackbird, Kenny Barron Trío, Tyreek McDole, Judith Hill, Mariza, Brandon Goldberg Trio + Shenel Johns, Donny’s Black Shoes, Zoot Suiters, D.K. Harrell, el bajista Marcus Miller y Lady Blackbird completan el cartel.. Canarias Jazz & Más Músicas Creativas ofrece en su 34ª edición un total de 59 conciertos repartidos en 16 municipios desde Santa Cruz de Tenerife hasta La Graciosa. El cartel incluye artistas internacionales de primer nivel: Take 6 junto a la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, Dee Dee Bridgewater, el pianista cubano Gonzalo Rubalcaba, Aymée Nuviola, The Vijay Iyer Trio, Melissa Aldana Quartet o Kennedy Administration. También participan voces jóvenes del archipiélago y España como Rita Payés, Lakecia Benjamin o Matteo Mancuso, junto a formaciones canarias como Las Albitas, La Local Jazz Band, Alexis Alonso Sextet y Joven Canarijazz Big Band. Se destaca la presencia femenina en un 42 % de los proyectos, así como la mezcla de actos en auditorios (Auditorio de Tenerife, Alfredo Kraus, Teatro Pérez Galdós) y más de la mitad gratuitos en plazas como Santa Ana, El Médano o Maspalomas, con inicio de muchos conciertos al aire libre a las 19:30 para reducir el consumo eléctrico. La programación al completo, con fechas, horarios y zonas, se puede consultar en la web oficial.. En su mayoría de edad, el Festival de Jazz de Cádiz presenta 24 propuestas -17 de acceso libre- distribuidas en espacios emblemáticos. Arranca econ el dúo Pedro Rosa & Joaquín Sánchez en Unicaja, seguido de Ana Crismán Arpaora. En el Parador Atlántico, las saxofonistas Kika Sprangers e Irene Reig (Alto For Two) ofrecerán un concierto con entrada libre al atardecer. El programa principal en el Baluarte de la Candelaria incluye el swing de Swing O’Day y la Jove Big Band Sedajazz, el espectáculo de Chipi & Chano Domínguez, la doble sesión de Sumrrá y Niño de Elche, la presencia de Cyrille Aimée y el proyecto Focus de Pedro Cortejosa con La Bramantina. También pasarán por el escenario Eric Truffaz & Antonio Lizana con New Sketches of Spain, Ariel Brínguez Quintet y Harold López-Nussa Trío, y Rita Payés, que pondrá el broche el domingo 27. El VI Forum JazzCádiz en la UCA incluye conferencias, master-classes, talleres de swing, ensayo abierto y un concierto didáctico infantil, todo gratuito con inscripción previa.. Festival íntimo e itinerante, Jazz Vejer celebra su edición 2025 en el pintoresco pueblo blanco de Cádiz. Abre con el Peter Bernstein Quartet, mezclando tradición y modernidad . El día 27 la programación recorre puntos emblemáticos del casco urbano y la muralla, agrupando conciertos cortos y sorpresas musicales para residentes y visitantes, manteniendo el ambiente relajado que define al evento. Jazz Vejer se distingue por priorizar la experiencia sobre el volumen: apenas tres días de música accesible, con alta calidad artística en múltiples rincones del casco antiguo y un único concierto de formato cerrado.. El XXVIII Festival de Jazz de Valencia comienzó el 12 de junio en los Jardines del Palau con la Banda Sinfónica Municipal y el New Tango Sextet, y el 25 repite con Ximo Tébar & The Champs y su fusión jazz-funk. En Sala Rodrigo destacan el Quartet Marquina Selfa (1 de julio) y el grupo de Ester Andújar con Carles Dénia & David Pastor (10 de julio). La Sala Iturbi acoge a artistas de renombre internacional: Avishai Cohen Trio presenta Brightlight (2 de julio), seguido de la brasileña Eliane Elias (3), el padre del Ethio-jazz Mulatu Astatke en gira de despedida (5), la versátil Andrea Motis con Temblor (6), el encuentro entre Michel Camilo & Tomatito (8), el guitarrista Julian Lage (9), un concierto sinfónico-jazz de Broadway con la Orquestra de València (11), el Al Di Meola Acoustic Trio (12) y solistas de la Orquestra con Chipi Chacón (13). Del 19 al 27 de julio, el ciclo Jazz a les pedanies trae al Castellar-l’Oliveral a Juan Saus & Martina Sabariego Big Band (19) y Latinswing Sextet (20), y a La Torre a Carlos Medina Quintet (26) y Plena 79 Salsa Orchestra (27), todos gratuitos. Además, del 7 al 10 de julio se celebran las master-classes del XXV Seminario Internacional de Jazz y Música Latina en el Conservatorio José Iturbi.. Bajo el lema «Raíz y Alas», Fijazz 2025 propone un viaje musical que fusiona flamenco y jazz, reuniendo ocho conciertos íntegramente españoles en un formato íntimo. La programación arranca el jueves 10 de julio con Dorantes y El tiempo por testigo, trío que hibrida jazz latino y bulería; sigue el viernes 11 con Chano Domínguez y su piano flamenco-jazz; el sábado 12 llega Andrés Barrios Trio con ‘Km. 0’, en diálogo con Sara Sánchez y Manuel de la Torre. El domingo 13 ofrece ‘Tatuajes de Mayte Martín. El miércoles 16, Caminero Trío con David Carpio presentan ‘Al cante’; al día siguiente, María Terremoto interpreta ‘Manifiesto’. El sábado 19 Antonio Lizana & Emilio Solla 4tet proponen ‘El Siempre Mar’; y el ciclo culmina el domingo 20 con Antonio Serrano & Kaele Jiménez ofreciendo ‘Jazz Caló’.
La Lectura // elmundo
La arpista y autora, principal renovadora de este lenguaje musical en nuestros días, encabeza el Jazzaldia 2025. Leer
La arpista y autora, principal renovadora de este lenguaje musical en nuestros días, encabeza el Jazzaldia 2025. Leer